La flexibilidad que el sátrapa nunca tuvo en vida la derrocha su monigote. Lo pueden zarandear con el ratón y tirarlo de un lado a otro. El jueguito es adictivo. Y terapéutico.
PD: Me entero por PD que la animación Flash es de Ulises Álvarez.
La flexibilidad que el sátrapa nunca tuvo en vida la derrocha su monigote. Lo pueden zarandear con el ratón y tirarlo de un lado a otro. El jueguito es adictivo. Y terapéutico.
PD: Me entero por PD que la animación Flash es de Ulises Álvarez.