
No ha cesado de alegrarme
la genial antología
que compilaste un buen día:
¡mil gracias por invitarme,
leerme y antologarme!
Gracias por esta bendita
amistad tan exquisita
que me honra, que me enaltece,
que me alza, que me ennoblece,
compañero que me edita.
***
Nota bene: Desde el 30 de noviembre de 2020, he publicado a diario en Belascoaín y Neptuno. Te invito a leer la décima de este día hace exactamente un año. Si sientes que me repito, recuerda que más se repite la realidad cubana.
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