
Ay, Cuba, qué desconsuelo,
qué tremendo descalabro
que te ha robado el anhelo
y que es del pueblo el flagelo
que lo agobia día a día,
le azuza la policía,
le aprieta más la tenaza
y le mata la alegría.
Ay, Cuba, qué desconsuelo,
qué tremendo descalabro
que te ha robado el anhelo
y que es del pueblo el flagelo
que lo agobia día a día,
le azuza la policía,
le aprieta más la tenaza
y le mata la alegría.
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